Cuando yo vivía en Tegucigalpa, hace varios años, tuve el gusto de conocer a este pintor, ya que mi Madre por su trabajo en un medio de comunicación lo conocia desde hacia mucho tiempo. Recuerdo que lo visitamos en su estudio y como todo artista me asombró la forma en que vivía, todo su espacio dedicado a sus obras de arte. Una de sus obras que más me gustó fue la de una mujer recostada en una noche de luna, se nota que a el le encanta la figura femenina. Tuve la suerte que me diera una lección y trucos para pintar al óleo, y hasta el día de hoy sus consejos me han servido.
Una serie de contrastes de color y figuras se pudo apreciar en la exposición “Arpegios” del artista hondureño Sergio Martínez el pasado 26 de junio.
La muestra se exhibió en las instalaciones de la Galería Clementina Suárez de Tegucigalpa, Honduras y presenta obras de este autodidacta del pincel que ha participado en exposiciones en Puerto Rico, Nicaragua, Estados Unidos y Honduras.
El artista reunió su nueva producción, conformada por 18 piezas, inspirada en las líneas de las imágenes renacentistas y clásicas de las madonas traídas a la modernidad.
La exposición toma su nombre porque las mujeres que concurren en sus pinceladas están en posesión de un instrumento musical que las identifica como creadoras de melodías. Estas se hacen acompañar de la diversidad de colores y los objetos de naturaleza muerta que contribuyen a estructurar el marco perfecto y armónico del cuadro.
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